Había una ves un matrimonio con cuatros hijos, dos mellizos de tres años, una nena de dos y otra de ochos meses, que vivían muy feliz en una casita muy precaria de Pilar. Ella era ama de casa y cuidaba a sus hijos. Su marido salía a trabajar para traer el pan de cada día a su mesa.Un día el matrimonio discutió fuertemente y el marido decidió irse de la casa. Ella lo esperaba ansiosamente pensando que el volvería, pero al pasar un mes entero, decidió ir a la justicia para que su ex marido le pase una cuota alimenticia para los chicos.Al poco tiempo de que su esposo la dejara se fue a vivir con su madre y su hermana, su madre había sufrido un accidente y había quedado paralítica, y su hermana no tenia un trabajo fijo. Al no poder dejar a su madre sola ni a sus hijos, ella no podía salir a trabajar y mientras esperaba ansiosamente la respuesta de la justicia. Al darse cuenta que esa respuesta no vendría, tomo la decisión de alquilar su vientre, para ayudar a una mujer que no pueda tener hijos y darles a los suyos una vida un poco mejor; pensaba pedir una ayuda mensual durante el embarazo, y una ves que nazca el bebé pediría un monto como para cubrir a sus hijos hasta que sean un poco mas grandes y pudieran salir a trabajar.A el poco tiempo de su anuncio de el alquiler recibió algunas ofertas y decidió aceptar la de una pareja, que no podía tener hijos y hacia mucho que lo deseaban. Ella tuvo a su hijo en su panza asta que nació y se lo dio a la pareja.Actualmente sus hijos son grandes y trabajan, y ella vive con la pensión de su madre en su casa.
pd: espero q les guste, perdonen la falta de ortografia y demas...
saludos
sábado, 5 de abril de 2008
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2 comentarios:
Topo!!!
Q cara de Gil q tnes en la foto jejeje
Muy bien, la historia está muy bien. No perdono las faltas de ortografía. Así que busca las reglas y aplicalas. Te doy un mes de tiempo, hasta el 23 de mayo.
Saludos
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