domingo, 22 de junio de 2008

pasen es solo un minuto

http://s2.ar.gladiatus.com/game/c.php?uid=55377

pasen por aca


es solo un minuto

no tienen nada mas que hacer que darle un click y listo

gracias


bss

martes, 3 de junio de 2008

Dos niños matan a una niña.

Había una vez un matrimonio y dos chicos de 8 y 9 años que vivían en su precaria vivienda en la localidad bonaerense de Almirante Brown.

La familia tenía muchos problemas. El padre era desocupado, la madre tenía serios problemas con la droga y los chicos eran continuamente maltratados, los golpeaban y ataban con cadenas.

Un día los dos chicos volvían del colegio como todos los días, pero ante de llegar a la casa los chicos se quedaron jugando en un terreno baldío cercano a su vivienda.

Al poco tiempo de estar ahí ven llegar a una nenita de tres años, que se había escapado de la casa.

Los chicos se pusieron a jugar con la nenita haciéndole lo que la madre le asía a ellos.

La ataron con un cable, como si fuera un perrito, la golpeaban. Todo era un juego asta que se dieron cuenta que la nenita no se movía y que no respiraba.

Ellos se fueron asustados a su casa y no le dijeron nada a nadie sobre lo que había ocurrido.

Al poco tiempo de lo sucedido, la familia de la nenita, la estaban buscando por el barrio. Los vecinos se sumaron en la búsqueda al igual que los chicos.

Al encontrar el cuerpo de la nena, los chicos quebraron en llanto y declararon todo lo que había pasado.

La familia de la nenita todavía no puede creer lo que paso con su hija.

Los dos chicos se encuentran a disposición de la Justicia de Menores, que todavía debe resolver si los deja con su familia o los envía a un hogar sustituto.

Fin

Mujer entierra a su marido con un celular.

Había una vez un matrimonio que vivía muy feliz en la ciudad de Nueva Jersey.

Ella cuidaba a su marido que padecía de una enfermedad terminal desde hace varios años. Al empeorar su salud decidió internarlo, pero al poco tiempo muere.

Al no poder superar la muerte de su esposo, cae en una profunda depresión.

Al llegar el velatorio decide poner los datos en la lapida. Además del obligado nombre del difunto y sus fechas de nacimiento y defunción, la mujer decidió darle un toque de originalidad a la tumba de su marido e incorporó el número de su celular.

La viuda al sentirse triste y desamparada, llama al celular para escuchar la vos del correo de mensaje que le dice: “Hola, este es el buzón de voz de John Jacobs, deje el mensaje después de la señal y te llamaré”.

Ella todavía lo sigue llamando, al igual que algún curioso que ve la lapida.

Fin